“El
agua que proporciona la naturaleza, en sus distintas formas, no reúne los
requisitos para ser consumida de forma directa por el ser humano, debido a la
contaminación que contiene. Para lograr la calidad satisfactoria en el agua, y
que ésta sea potable, se realizan destilaciones u otros procesos de
purificación. El agua puede contaminarse de diferentes formas, aunque la más
común en la actualidad (2013) es mediante descarga de agua servida o cloacas de
áreas urbanas en ríos y arroyos”. (http://es.wikipedia.org/wiki/Contam)
Otros
focos de contaminación de las aguas son los desechos orgánicos provenientes de
mataderos de ganado o de aves. El procesamiento de frutas y vegetales requiere
grandes cantidades de agua para el lavado, el pelado y blanqueado, lo que
produce gran cantidad de agua servida con alto contenido orgánico. Estas
concentraciones de materia orgánica originan un alto porcentaje de fosfatos en
el agua de los ríos o arroyos en que se descargan. Estos fosfatos ocasionan un
rápido crecimiento en la población de algas. Las algas utilizan el oxígeno en
gran cantidad, lo que hace que disminuya en el agua la concentración necesaria
de éste para permitir la respiración de los animales acuáticos, causando su
muerte.
No hay comentarios:
Publicar un comentario